lunes, 12 de diciembre de 2011

Manuales de instrucciones

Los tediosos manuales de instrucciones o, de uso o, del usuario o como mas les guste llamarlos, han sido un engorro desde tiempos inmemoriales. Complican más de lo que aclaran. Tienen un montón de hojas con explicaciones sin sentido y no tienen las que realmente importan. Los hombres se rien de nosotras porque no interpretamos un simple manual, "simple" será para ellos, porque los puñeteros manuales son escritos por hombres para hombres. Ellos se jactan de ser mas inteligentes que nosotras por descifrar un "simple manual de usuario". A ver, en lugar de editar un manual en trescientos mil idiomas, que sólamente vamos a leer uno de todos esos, porque no se ahorran las páginas de los otros idiomas que no necesitamos y editan un manual para hombres y una versión acotada para mujeres, escrita por mujeres, que sí, va a tener las dos instrucciones de funciones importantes que necesitamos saber: encender y apagar.
En el caso de los teléfonos celulares, hay algunas funciones mas, que son importantísimas: radio, música y alarma, pero el resto chicos, de verdad, no nos interesan.
Lo primero que te dice el manual, después de agradecerte que hayas elegido el producto, es que leas el manual completo antes de usar el aparato. Tiene ciento veinte páginas el manualcito, como quieren que me acuerde de las funciones si no prendo el teléfono y voy haciendo los pasos según el manual. ¿Alguien cree que voy a leer todo el manual y después me voy a acordar como programar la alarma con la radio. 
Funciones innecesarias con explicaciones innecesarias: Función Layar, ehhhhhhh ehhhhhhhh????? ..."permite buscar ubicaciones para obtener mapas o información local en tiempo real con la cámara del dispositivo..."
Este otro ítem del manual me encantó: SOCIAL HUB, una especie de correo y mensaje, supongamos que me parece super importante para mi vida cotidiana, leo las instrucciones de uso, ya que es la primera vez que voy a utilizarlo -para que vean que estoy abierta al avance de la tecnología como forma de simplificarnos la vida- y me encuentro con las siguientes instrucciones: 1_ En la pantalla de inicio, abra la lista de aplicaciones y seleccione SOCIAL HUB (clarísimo, tengo que abrir el programa, sino como voy a usarlo, no?). 2_ Vea y use los contenidos ofrecidos por SOCIAL HUB. Fin de las instrucciones para usar este super programa o aplicación SOCIAL HUB. Eso mas que una instrucción para usar el Fucking Social Hub, es una verdadera hijaputez, no me jodan no es una instrucción clara y concisa.
Y así podemos seguir con todas las instrucciones del manual del celular, del aire acondicionado, de la plancha, del home y de cualquier aparatito que uno compre. 
Yo insisto que es muy importante que los manuales de uso vengan diferenciados y escritos cada uno por su género.
 De esta manera, nos ahorramos un problema con nuestra pareja, usamos los adminículos a gusto de cada usuario y no programamos cosas inútiles en el aparato en cuestión, que después no sabemos para que sirven.

sábado, 3 de diciembre de 2011

Os odio a todos!!!

Os odio a todos, solía decir mi amigo Carlos Larrosa, "Chupito", así le pusimos los que lo queríamos, por su manera en que lo pronunciaba. Un filósofo de la vida, de esos que se aprenden mas que en una sesión de terapia. Y yo, como él, odio a todos aquellos que complican y aturden nuestras vidas. Cómo el médico que te da una receta y no te sirve en la farmacia, siempre falta algo, o se olvida de poner "tratamiento prolongado", o no aclara el componente que lleva el medicamento, o se equivoca en la droga que lleva. Te atienden en diez minutos, un turno que esperaste dos o mas semanas, siempre está demorado y nunca te aclara lo que tenés. Ellos, los médicos, son los que te arruinan al salir de un quirófano, arreglan la situación diciendo que te pescaste una "bacteria intrahospitalaria". Seguramente haya buenos profesionales, pero les aseguro, que esos son las excepciones a la regla.
Odio al empleado de banco, ese que te saluda con una amabilidad mas que fingida, el típico empleado que va por el banco con los mismos papeles de un box a otro, queriendo figurar que consulta, con otro inoperante como él, algo de trabajo, cuando en realidad están haciendo los cambios del Gran DT. 
Odio a la tonta de la recepción, de cualquier entidad privada, que te toma los datos personales para luego derivarte con algún otro empleado, que después de aguantar en la sala de espera mas de cuarenta minutos,  te terminen diciendo que no es un tema que ellos puedan resolver. Antes la inoperancia, era propiedad exclusiva de los empleados públicos, pero hoy mas que nunca se contagió al sector privado. Ese sí, es un virus con nombre y apellido.
Odio a los que se me pegan al culo en la fila del supermercado con un enorme carrito de compra, impidiendo que pase el resto de la gente  si estamos en el medio del pasillo. Yo dejo un espacio con el que tengo adelante para no piquetear el corredor, pero nunca falta un vivillo que se quiere colar diciendo: Ahhhh, no sabía que estabas en la fila, y yo les contesto: No, tranquilo estoy esperando el colectivo.

Hay otro virus interesante, que se denomina intolerancia, sin cura aparente, que se propaga con los meses, llegando a su punto mas crítico, los primeros días de diciembre. Ese mes, al que también odio, por caluroso, fastidioso, pegajoso y porque hace que, esta sociedad contaminada saque las miserias humanas, escondidas durante el año. La gente que lo padece, roza el límite con la locura. Por supuesto, que no soy yo, porque la padezco todo el año.










jueves, 27 de octubre de 2011

A tí!

Hoy he decidido poner punto final a nuestra relación, la que hemos mantenido por veinte años.
He intentado alejarme una y mil veces, sabiendo que era difícil hacerlo. Todos me decían que cuando un ser así llega a la propia vida es casi imposible olvidarlo; podrás desaparecer por un tiempo, pero al final vuelves a mi.
Quise hacerme indiferente, ignorar el daño causado. Has llegado a mi vida de manera temprana y dejaste huella en mi cuerpo, imposible de olvidar.
Contigo lo probé todo, cada vez que vuelves haces que envejezca de a lustros, sí para olvidarme que existes intenté bailar, correr, adelgazar y aun así sigues en mi mente y en mi piel.
Nuestra relación no puede continuar, vas y volvés a tu antojo, caprichosamente. Desaparecés por un tiempo, pero una mañana al terminar de ducharme, te vuelvo a ver en el espejo, reflejando mi angustia, mi dolor, mi decepción.
Llevas torturándome desde mi adolescencia, eres cruel, no me dejás alternativa, debo tomar una decisión, ya lo he intentado todo y no quisiste entrar en razones, te lo he pedido de mil maneras diferentes, te dejo todo lo que me pertenece, parto en busca de una solución, soy yo la que te abandona.
Intenta vivir sin mi, no me detengas, me voy de viaje en busca de un aliado que pueda hacerte frente y combatirte.
Hoy me despido, te dejo en soledad, espero que entiendas, comprendas y razones el daño que me has causado, sin mí no tiene sentido tu existencia ¡Acéptalo! Ojalá nunca volvamos a vernos, adiós despreciable celulitis.

viernes, 23 de septiembre de 2011

Malditas Mochilas

Yo no creo que me esté volviendo mas vieja, yo creo que me estoy volviendo mas crítica, mas observadora de la realidad, de lo cotidiano. Además, quien dijo que hay que ser viejo para volverse resongón, hay jóvenes protestando por todo y hay viejos divinos que siguen regalándonos su sonrisa día a día.
Estoy en contra de las malditas mochilas. Cada mañana es una verdadera aventura interespacial viajar en el transporte público argentino, o al menos el de Buenos Aires, con choferes de colectivos alterados y mala onda por los cuatro imbéciles que siempre están dispuestos a joderte el día o simplemente por ellos mismo. Bastante difícil es conseguir viajar en un colectivo, bus, bondi o como quieran llamarlo, que esté vacío o que tenga al menos espacio para poder subir, y como nunca faltan los idiotas que se quedan adelante, todos apiñados, pegados al caño que sostiene la máquina expendedora de boletos, a la que se agregó un nuevo integrante a esta maravillosa familia, la maquinita para tarjeta, que algunos la tienen adelante y otros junto a la de monedas. Yo creo que todos quieren estar en "Bailando por un sueño", sino que sentido tendría quedarse agarrados al caño de la máquina, tambaleándose de un lado al otro sin dejar pasar a nadie. Y por si fuera poco a éstos particulares y bonitos individuos se les agrega los "peques con sus mochilas satelitales", de volúmenes XXL. Yo pienso que llevan la "fucking" biblioteca nacional entera; cuando los veo me pregunto si usarán ese material todos los santos días, para que tantos elementos si bajan todo de internet. Se plantan como un Puma, a punto de ser tacleado por uno de los All Black, tienen los sentidos bloqueados ante la palabra PERMISO, no te escuchan o en realidad se hacen los que no te escuchan porque son tan imbéciles que creen hacerse los rebeldes de la sociedad, es como si te dijeran: _Viste que malo que soy, no te dejo pasar porque soy un jóven rebelde. A lo que yo les contestaría: _Vos no me dejás pasar porque la playstation te comió las pocas neuronas que trajiste de fábrica, y además para tu nulo conocimiento las células cerebrales no se reproducen, Subnormal!!!!! (diria un amigo valenciano).

sábado, 17 de septiembre de 2011

Las cosas que odio!

Nunca voy a entender porque los hombres cuando se sacan las medias siempre las dejan del revés, las dejan como un bollo, quedan duras en el tacho, casi te diria que parece un trapo retorcido. Ni te cuento las de fútbol que traen unas bolitas de goma negra que según ellos, es de la alfombra sintética de la cancha. Llenan todo el piso del baño con ese horrible invasor que no te lo levanta ni la aspiradora manual.
El tiempo que te hace perder cuando sacás las medias de la calesita donde las colgaste para que se sequen y tenés que despegarlas y darlas vueltas. Pero lo peor no son las medias, me acuerdo la época que éramos seis en casa, pobre madre lavando no solo medias sino los pañuelos de tela, esos cuadrados bien grande para los hombres, y los chiquitos para las mujeres, eran bordados, en casa recuerdo que había decenas en cada cajón, incluso las mujeres tenían sus pañuelos con la inicial bordada, todo un detalle rococó. Era un problema lavarlos, porque no existía aun el lavarropa automático, había que enjuagar todo a mano, y eran tantos los pañuelos que se hacía un lavado exclusivo para ellos. Qué horror! pobres mujeres, un mundo impensable sin lavarropa automático y sin microndas...

lunes, 5 de septiembre de 2011

Redes Sociales

Yo no estoy en contra de los avances tecnológicos, usados de forma correcta son grandes aliados para estar informados y actualizados, agilizan el trabajo, la búsqueda de contenidos. Yo estoy en contra de los extremos, de irse para un lado o para otro. No entiendo a la gente que sigue por twitter la vida de una celebridad o no (en la mayoria de los casos), de un jugador de fútbol, una cantante, un actor. Que me importa saber a que hora se levanta tal o cual, si se compró un perrito, si fue a comer caracoles a la costa mediterránea, cuando tengo alguno de  mis afectos verdaderos consumidos por la depresión y la frustación. Como puedo robarle tiempo a una amiga que lo necesita para "seguir" la vida de alguien que ni siquiera conozco personalmente. Tan poco interesante puede ser nuestras vidas, las de simples mortales, que necesito vivir la vida de otro. 
Tampoco entiendo a las personalidades que se quejan de no tener una vida privada, cuando son ellos mismos los que abren la puerta de su vida, los que nos muestran sus vacaciones, sus preferencias, su desayuno. Nadie entra en la vida de otro sin que se lo permitan. Acepto el medio como forma de publicar o promocionar una película, un cd, el trabajo de cualquier persona. El comentario de un deportista al finalizar un partido, seguramente dirán cosas mas interesantes que las que puedan preguntarle en una conferencia de prensa. Para mi el exponer la vida de uno en la red social, es como si pensáramos que una vida entre miles de millones fuese insignificante y necesitariamos testigos que nos vieran todo el tiempo, un gran reality show, es como decir: "Tu vida no pasará desapercibida porque yo seré tu testigo".

sábado, 27 de agosto de 2011

Belleza Femenina

No hay mujeres feas, hay mujeres pobres. Si bien es cierto que tener una buena base ayuda a cualquier tratamiento, o mejor dicho lo hace mas económico, porque cuando se viene de fábrica con ciertos parámetros es mucho mas fácil mantenerlo. Pero soy una convencida que no existen las mujeres feas, quien puede decir cuales son los parámetros de la belleza, las agencias de publicidad que crean  modelos, las marcas de ropa que diseñan talles especiales, como digo yo, solo para maniquies, porque si algún diseñador no nos odiaria tanto se daría cuenta que el común denominador de las mujeres tenemos talles diferentes. Ahora bien sin llegar a ser una super modelo, o una actriz de Hollywood, se puede ser tranquilamente una mujer atractiva, una bomba sexual, o modelo, simplemente hace falta tener dinero para asistir a centros de estética que nos hagan maso y mesoterapia, electromedicina, ondas rusas, lpg, contar con un personal training dos o tres veces por semana (mejor 5), poder ir a la peluqueria una vez al mes por lo menos (aquellas que debemos tapar las canas sabemos de lo que hablo), hacernos una hidratación capilar y porque no asistir a la dermatóloga para realizarnos todos los tratamientos específicos para el rostro, radiofrecuencia, ácido hialurónico, máscarillas con oro y no se que. Pero también no nos olvidemos de pasar por la depiladora (también sabrán de lo que hablo las que nos depilamos en casa con el enchastre que hacemos en el baño con la cera), y porque no la manicura y la pedicuría. De paso pasar por la dentista y colocar braquets para enderezar el comedor y cambiar alguna corona y amalgama por las de porcelana. Sin contar con ir de compras 2 veces al año para actualizar el guardarropa. Entonces vamos a ver si después de todo este circuito van a seguir diciendo que hay mujeres feas y lindas. Insisto hay mujeres POBRES....

martes, 16 de agosto de 2011

Cumplimiento cívico

Hemos votado una vez mas este año, algunos dicen derecho cívico otros lo mencionan como una obligación, pero lo mas importante es que seguimos haciéndolo cada oportunidad que se presente. Mas allá de cualquier resultado, lo importante es tomar conciencia que cada uno puede hacer el país que soñamos en los pequeños actos, no hay que esperar a cambie el sistema desde lo mas alto, no porque los de mas arriba estén corruptos, nosotros como ciudadanos debamos alimentar ese sistema. Cuando hacemos algo incorrecto, tan típico de los argentinos, colarnos en una fila, estacionar donde no se está permitido, sobornar para que el trámite salga primero, levantar un número del piso para que nos atiendan antes de nuestro turno, todos estos actos hacen un país diferente, no porque los demás lo hagan yo debo imitarlos. Luego somos los que viajamos al exterior y nos enamora la prolijidad, el orden, el respeto, la armonia. En el día a día también podemos tener un pais mas justo y soberano.

sábado, 13 de agosto de 2011

Inauguración

Acabo de crear un blog para expresarme, debido que es la manera en que mejor me siento, a través de la escritura, pero que cierto es cuando un escritor dice, sentir el temor de la hoja en blanco, no siempre uno tiene la cabeza despejada para decir cosas interesantes, mi profesor de RRPP decia que no hay que romper el silencio a menos que lo que se tenga para decir es mas interesante.Y hoy me siento así.