viernes, 15 de febrero de 2019

Camino de la escritura

    Cuando nos lanzamos al camino literario nos hacemos miles y millones de preguntas ¿Podré escribir? o mejor dicho ¿Podré escribir algo interesante? También se nos cruza por la cabeza la peor de todas las dudas ¿Podré escribir algo que guste? Después de mucho años de incertidumbre y de respuestas aún sin contestar, las personas que escribimos nos terminamos dando cuenta de que "Quién es capaz de contestarnos algo certero". No existen las fórmulas mágicas para escribir ni tampoco se aprende el talento. Se aprende a escribir lo mejor que se pueda dar. Es un trabajo que hay que ejercitar todos los días.


    Cuando empecé a leer mis primeros libros de cuentos, tenía nueve o diez años. Eran libros que me prestaban en la biblioteca del barrio o en la escuela. Lograba sumergirme en aventuras de niños exploradores e historias mágicas. Luego, con el tiempo, descubrí otras sagas como "Elige tu propia aventura", que para mi gran sorpresa y alegría se siguen editando y los chicos las siguen leyendo.
A medida que crecía los libros despertaron en mí una necesidad de reescribir esas historias. Me gustaba imaginar que esos planetas lejanos se referían a la cuadra de mi casa, que los protagonistas eran mis amigas y compañeros del colegio. Los villanos no eran seres verdes ni con espadas sino algún vecino que no nos dejaba pasar en bicicleta por su vereda.


   La lectura me acompañó desde mi niñez, me ayudó a crear mundos y a viajar por lugares extraordinarios aún estando sentada en el umbral de mi casa. Cuando terminé el ciclo secundario tuve dudas para ingresar a la carrera de letras en la UBA. Pero con los años fui descubriendo que la lectura continua y diversa me enseñaron a amar con más intensidad el oficio de escribir. La hermosa pasión de contar historias, de viajar a través de un libro, de entrar en la cabeza de un personaje al que llegamos a sentir una empatía tan fuerte como lo hacemos con una persona real.
     Viajar es maravilloso y quisiera estar en permanente movimiento por el mundo, pero con la lectura puedo ir más allá de cualquier frontera.

    Mis maestros fueron los libros que leí, los buenos, los excelentes, los extraordinarios y también, lo fueron los malos. Desde los clásicos infantiles que leí una y otra vez, de niña y para mis sobrinos. Crónicas, biografías, ficción, no ficción, policiales, ciencia ficción, romance, juvenil o fantástico son géneros que han alimentado mi escritura y que siguen haciéndolo. Por qué leer tan solo uno si puedo vibrar con distintos géneros.

    Mi deuda pendiente es el género lírico, les debo confesar que no soy muy lectora de poesía y la dejaré en mi lista de pendientes para cumplir durante el 2019. Ya les iré contando como avanzo en próximos post de mi querido blog.


    Los libros que descubrí el último año me sorprendieron de manera inesperada. Algunos de ellos fueron: Los diarios de John Cheever y las crónicas de Zweig.
También, leí más cuentos que novelas y eso me enseñó a condensar una trama en diez páginas. Los elegidos para recomendarles hoy son: "El último día del verano" de Ian McEwan, con final bomba, como me gustan a mí. Otro que te mantiene en vilo hasta el final es "Un día perfecto para el pez banana" de Salinger.

     Y no puedo dejar de nombrar a mi querido Juan José Saer, un cuento que les va a encantar, sobre todo se los recomiendo para empezar con este autor que no es fácil. El cuento que adoro es "Al abrigo", sensacional.


    Les agradezco que hayan leído este post y l@s dejo tranquil@s para que recorran este blog. A continuación les comparto los links de mis redes sociales, si es que desean visitarlas.
Hasta la próxima.




viernes, 8 de febrero de 2019

San Valentín

    Seguimos enamorándonos en el mes de Febrero. Se acerca #SanValentín y quiero compartir bellas y dulces palabras sonoras de amor. 
    Hemos crecido con las historias de hadas y príncipes, con sueños románticos y flechazos de Cupido, pero qué hay detrás de todo aquello ¿Mito o Realidad? 
    En muchas ocasiones no nos importan si son leyendas o fábulas, nos gusta creer en un amor romántico y apasionado de película hollywoodense.
    Sabemos que son pura fantasía pero amamos seguir creyendo en ellas para alimentar nuestros corazones heridos o hechizados.


    La historia de #SanValentín, la podemos encontrar siglos y siglos atrás. en épocas del Imperio Romano, cuando el cristianismo se expandía por todo el territorio. Aunque los dirigentes de aquella época se esforzaban por combatir este surgimiento de la nueva fe. Es entonces cuando aparecen tres mártires romanos llamados Valentín. Algunos señalan a San Valentín de Terni como el legítimo propietario de esta hermosa tradición tan romántica que lleva a personas en todo el mundo a demostrar su amor en esta fecha.


    Otra de las leyendas de este santo, se le atribuye a Valentino, un mártil en África. Pero la más romántica de todas estas leyendas es la de San Valentín de Roma, un sacerdote romano que acompañaba a los personas que habían sido encarceladas por practicar la fe cristiana y les ayudaba a prepararse para el martirio y la muerte.
   También, existe otra versión en que cuenta la historia de un sacerdote que casaba a los jóvenes soldados, a pesar de la prohibición que existía por parte de las autoridades a contraer matrimonio por considerar que serían mejores combatientes si no estaban comprometidos con la vida familiar. Casaba a las parejas en secreto, según la tradición católica de la época. Cuando fue descubierto, fue martirizado y decapitado.


    Seguramente, fue durante la romántica Edad Media que se asoció este amor heroico y mitológico a la figura de San Valentín. Quizá fue creciendo como una fábula hasta llegar a nuestros días.
   La Iglesia católica eliminó esta festividad en el año 1969 expresando faltas de pruebas a la existencia de este mártir.
    En los países anglosajones, durante el Siglo XIX, comenzó a usarse la tradición de intercambiar postales con mensajes de amor el día 14 de febrero. Al poco tiempo, se le sumó a esta hermosa tradición, la de regalar rosas o bombones.


    Luego, y más cerca de nuestro tiempo, Siglo XX, la publicidad y los comerciantes tomaron a San Valentín como el patrono de los enamorados que habían sido elegidos por la flecha de Cupido para incrementar sus ventas.

  Fecha comercial o no, lo más importante es compartir con nuestro ser amado un rato romántico y apasionado  para cuidar el amor que nos une a esa persona que nos hace suspirar.


   Grandes autores le han escrito al amor, grandes pintores y artistas y cantantes hay compuestos bellas obras de arte para homenajear este sentimiento tan puro. 
   Podrán cambiar muchas cosas en el mundo, pasarán décadas y años y siglos pero siempre la humanidad seguirá acompañada por el único sentimiento que perdura, #ElAmor.


   L@s invito a seguir compartiendo historias románticas y apasionadas en el mes de Cupido a través de mis redes sociales, en los enlaces que les dejo a continuación:



viernes, 1 de febrero de 2019

14 Corazones. A través del tiempo

    Hoy comienza febrero y ya estamos palpitando un San Valentín a pura lectura. El día 14 será el lanzamiento de la Antología romántica 14 corazones, a través del tiempo.
     La idea de este proyecto surgió a partir de la reunión de tres escritoras que estaban merendando por Buenos Aires, en una hermosa tarde de primavera. Este proyecto fue creciendo poco a poco y nos fuimos uniendo otras escritoras del género romántico.


     Cuando llegó a mis oídos la propuesta de participar en este proyecto, fue doble la alegría porque además de formar parte de un equipo de escritoras, la causa iba a ser solidaria.
     Las ganancias de esta antología serán donadas a la Biblioteca Infantil de la ciudad de La Plata Del otro lado del árbol


     Teníamos dos condiciones a la hora de escribir los cuentos y relatos, la primera era que debían incluir al menos una carta y, la segunda condición era que se desarrollara en un contexto histórico. En mi caso, he elegido la época de la Primera Guerra Mundial y cuyos protagonistas se ven separados por la contienda. Su amor se manifiesta través de las cartas que se envían Mary y Damian.
"Al final de Preston" es el título que elegí para esta historia de amor en tiempos de guerra.


     Además de escribir nuestros textos, cada una se ocupó de algo diferente. Por ejemplo Anita Amado fue la genia creativa de los Fan art y las portadas, tanto de los cuentos como la del libro. También realizó un emotivo booktrailer que te hará enamorar, no solo en San Valentín si no el resto del año.

     Estoy feliz por la convocatoria que me hicieron mis colegas que deseo que esta antología salga cuanto antes. Les cuento que hemos trabajado muchas horas para conseguir un libro de calidad y ternura, de excelencia y romanticismo. A pesar de las épocas terribles y oscuras que atravesó la humanidad, siempre al final está el amor, la pasión, la tolerancia. 


     Espero que disfruten estas historias y que agenden en la lista de libros pendientes "14 Corazones. A través del tiempo".
    Les agradezco que me acompañen en este blog y l@s invito a visitar mis redes sociales donde podrán encontrar novedades y fechas de presentación.